Hablar de que nos vamos a comprar un portátil para jugar es exponerse a posibles comentarios negativos que en muchos casos nos hace retractarnos de nuestra decisión.
Es completamente normal encontrarse por ahí a alguna que otra persona desinformada que nos pone en una indecisión con afirmaciones tales como. “¡Pero si los portátiles para jugar son un ladrillo!”, “¡Uno de sobremesa siempre será mejor!”.
Hoy vamos a hacer mención mediante este artículo de algunos de los mitos más recurrentes a la hora de comprar un portátil para gaming, cabe mencionar que, si bien en alguna época remota pudieron ser ciertos, hoy no tienen cabida en el actual mundo del gamer. El objetivo de Professional Wireless es que juntos derrumbemos esos mitos que ya están mandados a recoger.
Ningún portátil es tan potente como uno de escritorio
Quizá es cierto que la experiencia no es la misma, pero esto no significa que los portátiles no cuenten con un buen rendimiento y unos excelentes componentes. Existen portátiles que cuentan con un Intel Core i7 de 11º generación, RTX 3080 y 16 GB de memoria RAM que se igualan a muchos de los computadores gaming del mercado. Es totalmente verdadero que su precio es un poco elevado, pero esto desmiente la teoría de que los portátiles no cuentan con la potencia necesaria para una partida de streaming completa.
Los portátiles se sobrecalientan
Bastan unos cuantos casos en los que uno o varios equipos han tenido problemas con el calentamiento del hardware para que se generalice esta idea de que todos y cada uno de los portátiles son propensos al sobrecalentamiento. Es cierto que este ha sido, históricamente, uno de los mayores problemas del gaming en portátiles, pero tengamos en cuenta que no es fácil meter todo lo que tiene un PC de alta gama en un espacio más reducido como el de un portátil, pero por suerte, los avances en este terreno han sido espectaculares, y el sobrecalentamiento forma parte del pasado. Consiguiendo en la actualidad mantener los portátiles fríos incluso durante el juego o la edición de vídeo con múltiples programas abiertos.
Lo consiguen gracias a sus múltiples ventiladores y sus heatpipes (tubos de calor), dispuestos a maximizar los recursos para que no tengamos que jugar bajo el aire acondicionado.
La pantalla se ve mal
Es algo bastante subjetivo, porque hay portátiles con pantallas de baja resolución, y otros que son una auténtica maravilla. Recordemos que todo depende de la marca, las prestaciones y las características generales del portátil, es posible encontrar laptops con una muy buena calidad de pantalla, un gran tamaño y tecnología IPS. Hasta existen portátiles con resolución 4K que son realmente poderosas.
El sonido es malo
Como en el caso anterior, la calidad del sonido depende de muchos factores, como la tarjeta de sonido del portátil y sus altavoces. La realidad es que el sonido es uno de los aspectos más fáciles de sacrificar de su computadora portátil.
De cualquier manera, la calidad del audio no afectará el rendimiento del juego ni causará ningún daño. Solo necesitas elegir un modelo con buen sonido o, en caso contrario, conectar unos auriculares potentes.
La batería se funde a la hora
Otro mito más popular, lo negamos desde el principio. Mucha gente cree que la batería se derretirá en menos de una hora debido al sobrecalentamiento del portátil. Pero te hemos explicado que el sobrecalentamiento no es un problema, y mucho menos la batería.
De hecho, la autonomía depende de la capacidad de la batería del portátil y del propósito que le des, no de si está dedicada a los juegos. Además, algunos modelos pueden proporcionar hasta 8 horas de duración e incluso se pueden jugar de forma intensiva.